jueves, 13 de enero de 2011

ahora les llamamos objetivos

Comienza el 2011, intentamos cargar las pilas, cada uno como sabe, o como puede, o como le dejen. Las cargamos porque sí, porque no queda más remedio, porque el dejar de fumar, ir al gym o a pilates, cambiar de piso, dejar el trabajo, pasar más tiempo con los tuyos... todos esos elementos, que, hace no mucho, eran sólo buenas intenciones ahora se llaman objetivos. Los objetivos están para cubrirse, pero ¡ojo con lo que deseas que puede hacerse realidad! y aquí está: todos deseábamos dejar de fumar y va y papaíto estado "casi nos lo prohibe del todo". Ahora muchos se ven obligados a dejar de fumar, y mientras unos lo dejamos, se van a enganchar a otros tercermundistas y les venden a ellos el tabaco que nos escamotean a nosotros. Y los europeos, los cultos e intelectuales, los de izquierdas, bohemios, los burguesitos que hemos tenido la potra de salir al mundo en este lado, les damos las gracias. Gracias por prohibirme tomar decisiones, eliminar es stress de mi vida era otro de mis objetivos para 2011. Nunca me ha gustado que me prohiban las cosas, desde niña he sentido que era mi responsabilidad tomar mis propias decisiones, mi padre lo sabe bien. Me he equivocado mucho pero no me arrepiento de nada. Tengo miedo de esas personas que se sienten cómodas prohibiendo en su coto privado pero van a enriquecerse a otros montes vendiendo eso mismo que prohiben. Dejémonos de apariencias, ¡que mal me sientan!